Hace unos años leí un libro de Marvin Harris en el que este antropólogo americano exponía sus ideas acerca de las perspectivas nomotética e idiográfica para el análisis de los fenómenos culturales y sociales. No mucho tiempo después hice una búsqueda en Internet con la intención de refrescar estos conceptos, pero no encontré ningún sitio web en el que se explicasen. No tengo idea de cómo estará la cosa ahora, pues no he intentado la búsqueda, pero me gustaría ampliar la información para quien tenga interés en ella, así que esta será mi pequeña aportación.
La vieja idea de que el árbol no deja ver el bosque y el bosque el árbol nos vendrá bien como sencilla imagen para comprender estos enfoques. Cuando uno observa una sociedad o una cultura nomotéticamente está mirando el bosque; si lo hace idiográficamente mira los árboles. Harris empleó estos términos en relación a las distintas perspectivas del estudio antropológico. La Escuela de Franz Boas era netamente idiográfica mientras que sus propias ideas de materialismo cultural eran nomotéticas. Sin embargo fuera de las ciencias sociales podemos encontrar ambas tendencias de análisis entre las personas, y, curiosamente, tales tendencias marcan también las tendencias políticas. Así la izquierda es fundamentalmente idiográfica, tanto en su valoración de los problemas sociales como en sus ideas sobre la libertad, y la derecha es nomotética en los mismos asuntos.
Pero ¿qué significa exactamente mirar la sociedad y la cultura nomotética e idiográficamente?. Si la imagen del bosque y los árboles no es suficiente definiremos mejor los términos.
Si yo miro a la sociedad o a la cultura y busco en ellas aspectos comunes, esenciales, universales; si busco en sus interacciones internas y con otras sociedades y culturas pautas y regularidades, si, en definitiva, yo generalizo, si doy un papel metodológico fundamental a la estadística, si observo las normas y costumbres, así como las ideas “desde fuera”, adopto un enfoque nomotético. Este podrá reducir la complejidad a términos más manejables, pero al hacerlo necesariamente eliminará matices y detalles de las individualidades, por otro lado tan importantes.
La mirada idiográfica es más compasiva, si se puede decir de esta manera. Se atiende por encima de todo a las ideas y comportamientos, hábitos y costumbres de las personas individuales, apreciándolos en toda su riqueza. Uno trata de ponerse en el lugar del otro y comprender sus razones. Así, no se mira al otro (entendiéndolo como grupo), desde fuera, como en el enfoque nomotético, deliberadamente distanciado e impersonal, sino desde dentro, desde las vísceras. Esto puede impedir que se analicen las cosas fría y racionalmente, algo completamente necesario si se quiere hacer ciencia rigurosa.
Del mismo modo que el nomotético generaliza el idiográfico personaliza y, en su faceta científica, si la tiene, se especializa. Siente el idiográfico una repugnancia natural hacia las generalizaciones, la mayoría de las cuales le parecen especulaciones sin base sólida, y prefiere antes “el caso” que “la ley”.
En política, como decía, estos dos modos de ver las cosas, cada uno con sus virtudes y sus defectos, son un poderoso polarizante psicológico. Analizando la economía y el derecho, por ejemplo, los nomotéticos se siente inclinados a apreciar normas generales e impersonales que sirvan de marco para el desarrollo espontáneo, libre e impersonal del mercado, mientras que los idiográficos creen que se debe legislar para corregir las imperfecciones de la sociedad, tan patentes cuando se fija uno en los “fracasos” de individuos de carne y hueso y las injusticias diarias cometidas en esa tierra de nadie más allá del marco de la ley, y creen asimismo que la economía no puede funcionar autónomamente sin generar muchos “casos” fracasados.
En una cuestión social tan importante como es el encuentro y la interpenetración de las culturas y las sociedades, que hoy con la globalización es más que evidente, las perspectivas nomotética e idiográfica nuevamente difieren. La primera incide más en el Choque y la segunda más en la Alianza de las Civilizaciones. El nomotético ve las diferencias esenciales entre las culturas, pues observa la cultura misma, mientras que el idiográfico ve en todas ellas las similitudes, pues en todas ve personas.
Un concepto tan manido y poco aclarado como la libertad es del todo divergente entre nomotéticos e idiográficos. Para un analista idiográfico es del todo necesaria la libertad del individuo para hacer cuanto desee, para realizarse dentro del cuerpo social. Ello puede llevar a que se busquen privilegios para ciertas comunidades o grupos de los que uno forme parte sin percatarse de que se obtienen a costa del resto de la sociedad. Un analista nomotético cree en la libertad asociada a la responsabilidad. La sociedad se desentiende de la suerte de las personas, que deben ocuparse y preocuparse de su lugar en ella. La voluntariedad prima en la caridad, el mecenazgo en las artes. El Estado representa un papel de mero garante de los contratos y del cumplimiento de leyes de carácter general e impersonal. El individuo es libre para hacer lo que quiera dentro del marco de la legalidad vigente y del respeto a los derechos fundamentales de los demás (siendo estos derechos fundamentales un número muy reducido). Y si fracasa debe asumir que se debe a su propia incompetencia o dejadez.
También la visión de la naturaleza humana está condicionada por cual de estas dos perspectiva se adopte. El idiográfico cree en la tabla rasa, en la importancia de la cultura y la sociedad, del ambiente humano, para moldear las personalidades, para crear los individuos. Si uno mira a quien fracasa “desde dentro”, si es él mismo o se pone en su lugar, podrá proyectar en la sociedad la culpa, la responsabilidad de su situación. Es lo que se denomina en psicología social “atribución”. Todo mal (e incluso todo bien) se atribuye a causas externas, especialmente a intenciones y actos de otros. El nomotético cree en cambio en la naturaleza humana innata, en los aspectos más universales de nuestra conducta y nuestra personalidad, así como en las diferencias no achacables a la acción de la sociedad sobre el individuo. La sociedad no es responsable de la suerte de sus componentes.
El enfoque que hago sobre lo nomotético e idiográfico es netamente nomotético, con todas las carencias y defectos que ello conlleva, y así soy yo. No puedo dejar de posicionarme al respecto, puesto que creo que la sociedad precede al individuo al menos en una cosa: si la última no funciona el primero se verá en una situación muy precaria. Si por proteger unos cuantos árboles escogidos por una observación compasiva y atenta se quema el resto del bosque es muy probable que todo el ecosistema de la zona se venga abajo, echando abajo también a esos pocos árboles. Así creo que la sociedad debe ser libre en un sentido liberal de derechas, es decir, en su vertiente económica, básicamente, y que cada individuo ha de valerse por sí mismo (con ayuda de los suyos y de todos aquellos que voluntariamente decidan ayudarle) para salir adelante, lo cual es un estimulante y un generador de impulsos productivos. No obstante comprendo que el mundo puede ser –y de hecho es- un valle de lágrimas, y que existen muchas injusticias e imperfecciones en el funcionamiento de la sociedad. ¿Y qué hacemos para corregirlas –correr un estúpido velo?. Y es que en esto no me queda otro remedio que ser idiográfico: hay que prestar un mínimo de atención a los matices. Los inmigrantes musulmanes pueden representar un grave problema, pero no dejan de ser personas, y no es igual un pakistaní que un marroquí, así como no es igual un marroquí de Casablanca que uno de pueblo, por no hablar de las diferentes personalidades de cada uno, independientes de su procedencia. Igualmente los parados de larga duración pueden ser, muchos, personas que han desaprovechado oportunidades, pero muchos pueden estar sufriendo un revés de la fortuna no atribuible enteramente o en absoluto a sus deméritos. Etc.
Las personas son muy importantes y, en última instancia, la realidad humana. Pero debe salvarse la sociedad para salvarlas, antes que salvarlas provisionalmente deteriorando o destruyendo su hábitat, que es la sociedad, con políticas benevolentes y cortoplacistas.
La vieja idea de que el árbol no deja ver el bosque y el bosque el árbol nos vendrá bien como sencilla imagen para comprender estos enfoques. Cuando uno observa una sociedad o una cultura nomotéticamente está mirando el bosque; si lo hace idiográficamente mira los árboles. Harris empleó estos términos en relación a las distintas perspectivas del estudio antropológico. La Escuela de Franz Boas era netamente idiográfica mientras que sus propias ideas de materialismo cultural eran nomotéticas. Sin embargo fuera de las ciencias sociales podemos encontrar ambas tendencias de análisis entre las personas, y, curiosamente, tales tendencias marcan también las tendencias políticas. Así la izquierda es fundamentalmente idiográfica, tanto en su valoración de los problemas sociales como en sus ideas sobre la libertad, y la derecha es nomotética en los mismos asuntos.
Pero ¿qué significa exactamente mirar la sociedad y la cultura nomotética e idiográficamente?. Si la imagen del bosque y los árboles no es suficiente definiremos mejor los términos.
Si yo miro a la sociedad o a la cultura y busco en ellas aspectos comunes, esenciales, universales; si busco en sus interacciones internas y con otras sociedades y culturas pautas y regularidades, si, en definitiva, yo generalizo, si doy un papel metodológico fundamental a la estadística, si observo las normas y costumbres, así como las ideas “desde fuera”, adopto un enfoque nomotético. Este podrá reducir la complejidad a términos más manejables, pero al hacerlo necesariamente eliminará matices y detalles de las individualidades, por otro lado tan importantes.
La mirada idiográfica es más compasiva, si se puede decir de esta manera. Se atiende por encima de todo a las ideas y comportamientos, hábitos y costumbres de las personas individuales, apreciándolos en toda su riqueza. Uno trata de ponerse en el lugar del otro y comprender sus razones. Así, no se mira al otro (entendiéndolo como grupo), desde fuera, como en el enfoque nomotético, deliberadamente distanciado e impersonal, sino desde dentro, desde las vísceras. Esto puede impedir que se analicen las cosas fría y racionalmente, algo completamente necesario si se quiere hacer ciencia rigurosa.
Del mismo modo que el nomotético generaliza el idiográfico personaliza y, en su faceta científica, si la tiene, se especializa. Siente el idiográfico una repugnancia natural hacia las generalizaciones, la mayoría de las cuales le parecen especulaciones sin base sólida, y prefiere antes “el caso” que “la ley”.
En política, como decía, estos dos modos de ver las cosas, cada uno con sus virtudes y sus defectos, son un poderoso polarizante psicológico. Analizando la economía y el derecho, por ejemplo, los nomotéticos se siente inclinados a apreciar normas generales e impersonales que sirvan de marco para el desarrollo espontáneo, libre e impersonal del mercado, mientras que los idiográficos creen que se debe legislar para corregir las imperfecciones de la sociedad, tan patentes cuando se fija uno en los “fracasos” de individuos de carne y hueso y las injusticias diarias cometidas en esa tierra de nadie más allá del marco de la ley, y creen asimismo que la economía no puede funcionar autónomamente sin generar muchos “casos” fracasados.
En una cuestión social tan importante como es el encuentro y la interpenetración de las culturas y las sociedades, que hoy con la globalización es más que evidente, las perspectivas nomotética e idiográfica nuevamente difieren. La primera incide más en el Choque y la segunda más en la Alianza de las Civilizaciones. El nomotético ve las diferencias esenciales entre las culturas, pues observa la cultura misma, mientras que el idiográfico ve en todas ellas las similitudes, pues en todas ve personas.
Un concepto tan manido y poco aclarado como la libertad es del todo divergente entre nomotéticos e idiográficos. Para un analista idiográfico es del todo necesaria la libertad del individuo para hacer cuanto desee, para realizarse dentro del cuerpo social. Ello puede llevar a que se busquen privilegios para ciertas comunidades o grupos de los que uno forme parte sin percatarse de que se obtienen a costa del resto de la sociedad. Un analista nomotético cree en la libertad asociada a la responsabilidad. La sociedad se desentiende de la suerte de las personas, que deben ocuparse y preocuparse de su lugar en ella. La voluntariedad prima en la caridad, el mecenazgo en las artes. El Estado representa un papel de mero garante de los contratos y del cumplimiento de leyes de carácter general e impersonal. El individuo es libre para hacer lo que quiera dentro del marco de la legalidad vigente y del respeto a los derechos fundamentales de los demás (siendo estos derechos fundamentales un número muy reducido). Y si fracasa debe asumir que se debe a su propia incompetencia o dejadez.
También la visión de la naturaleza humana está condicionada por cual de estas dos perspectiva se adopte. El idiográfico cree en la tabla rasa, en la importancia de la cultura y la sociedad, del ambiente humano, para moldear las personalidades, para crear los individuos. Si uno mira a quien fracasa “desde dentro”, si es él mismo o se pone en su lugar, podrá proyectar en la sociedad la culpa, la responsabilidad de su situación. Es lo que se denomina en psicología social “atribución”. Todo mal (e incluso todo bien) se atribuye a causas externas, especialmente a intenciones y actos de otros. El nomotético cree en cambio en la naturaleza humana innata, en los aspectos más universales de nuestra conducta y nuestra personalidad, así como en las diferencias no achacables a la acción de la sociedad sobre el individuo. La sociedad no es responsable de la suerte de sus componentes.
El enfoque que hago sobre lo nomotético e idiográfico es netamente nomotético, con todas las carencias y defectos que ello conlleva, y así soy yo. No puedo dejar de posicionarme al respecto, puesto que creo que la sociedad precede al individuo al menos en una cosa: si la última no funciona el primero se verá en una situación muy precaria. Si por proteger unos cuantos árboles escogidos por una observación compasiva y atenta se quema el resto del bosque es muy probable que todo el ecosistema de la zona se venga abajo, echando abajo también a esos pocos árboles. Así creo que la sociedad debe ser libre en un sentido liberal de derechas, es decir, en su vertiente económica, básicamente, y que cada individuo ha de valerse por sí mismo (con ayuda de los suyos y de todos aquellos que voluntariamente decidan ayudarle) para salir adelante, lo cual es un estimulante y un generador de impulsos productivos. No obstante comprendo que el mundo puede ser –y de hecho es- un valle de lágrimas, y que existen muchas injusticias e imperfecciones en el funcionamiento de la sociedad. ¿Y qué hacemos para corregirlas –correr un estúpido velo?. Y es que en esto no me queda otro remedio que ser idiográfico: hay que prestar un mínimo de atención a los matices. Los inmigrantes musulmanes pueden representar un grave problema, pero no dejan de ser personas, y no es igual un pakistaní que un marroquí, así como no es igual un marroquí de Casablanca que uno de pueblo, por no hablar de las diferentes personalidades de cada uno, independientes de su procedencia. Igualmente los parados de larga duración pueden ser, muchos, personas que han desaprovechado oportunidades, pero muchos pueden estar sufriendo un revés de la fortuna no atribuible enteramente o en absoluto a sus deméritos. Etc.
Las personas son muy importantes y, en última instancia, la realidad humana. Pero debe salvarse la sociedad para salvarlas, antes que salvarlas provisionalmente deteriorando o destruyendo su hábitat, que es la sociedad, con políticas benevolentes y cortoplacistas.
Por cierto: ¿no es idiográfico decir que las personas no somos totalmente nomotéticas ni idiográficas?. Pero así es.
41 comentarios:
Muy interesante esta entrada.
Abundando en el último párrafo, entiendo que puede haber determinados análisis en los que predomine más una u otra visión, pero un buen estudio científico debería siempre considerar ambas vías de aproximación a la realidad.
Felicidades (atrasadas) por tu cumple, GERMANICO; siento haber llegado tarde también a los bombones. jejeje
El mío ha sido ayer (44) y lo pasé en la mar, sin ganar un duro por culpa de un temporal que nos dió una paliza de tres pares de ......; le había prometido a la tripulación que pescaríamos 44 meros y tuvimos que escapar sin poder faenar.
He visto que hoy es el de ELJINETEPALIDO y le felicito desde aquí.
Con respecto al texto, me lo he leido demasiado deprisa para asimilarlo y comentarlo, pero lo haré en otro momento.
Un abrazo (dos ....o tres).
Al final decisión Salomónica, no queda otra.
El asunto, en mi opinión, es hasta dónde se llega en la destrucción de matices cuando se trata de establecer un punto de vista nomotético. ¿Cúal es el grado de generalización adecuado?. En el otro caso, el ideográfico, el patrón del que se parte es variable pero mucho más definido (cada día más)precisamente por estar más matizado y mucho más estudiado. El objeto de estudio es complejo pero definido.
Podemos hablar de culturas o de inviduos, eso parece claro, pero ¿quién se encarga de definir las difusas fronteras de las culturas, desde que punto de vista las segmentamos, desde el religioso, económico, gastronómico, idiomático, orientales y occidentales, europeos y americanos, norteamericanos e iberoamericanos...? ¿Es lo mismo un chino que un vietnamita, ambos son orientales y tienen en común rasgos de carácter étnico, por poner un ejemplo?. No hay unas bases definidas y en el generalismo nos podemos encontrar con una falta evidente de referencias, algo bastante peligroso, cuando se trata de establecer debates que conduzcan a la creación de políticas generales de funcionamiento.
Es indudable que, como dice Ijon, el acercamiento a la realidad se produzca desde los dos extremos hasta alcanzar una confluencia, que no será exacta pero si aproximada .
Abrazos
Muchas gracias, Batiola, y lo mismo para tí.
Aunque no es exactamente lo mismo, tu post me ha recordado a la distinción emic/etic de Sociología.
Supongo que la conoces pero bueno:
http://es.wikipedia.org/wiki/Emic_y_etic
Por lo demás me parece todo un pelín cogido por alfileres (ya sabes que te lo digo con todo el cariño, jejeje) y te planteo una duda: El Derecho anglosajón es eminentemente casuista, es el juez más que la ley lo que importa, (parece que esto sería idiográfico)y sin embargo son sociedades con amplia tradición liberal sin muchas concesiones izquierdistas (esto parece que sería nomotetico). ¿como lo explicas?
(En cualquier caso, hay que ver que temas eliges ¡¡¡ . Saludos y buen sabado)
Por supuesto que un estudio científico que tenga por objeto el sujeto debe contemplar ambas vías de aproximación, Ijon, sobre todo si el sujeto lo es en toda regla, si es humano, un ser capaz de tener y comunicar estados subjetivos complejos.
Esa subjetividad que nos caracteriza es difícilmente objetivable. ¿Cuál es el grado de generalización adecuado?: según lo que se observe del amplio elenco de comportamientos y costumbres humanos, Lebeche. Quizá esa pregunta nos remita a esta otra: ¿Qué aspectos de nuestra acción y percepción son universales y cuales son idiosincrásicos?. Si hablamos de conocimiento para poder establecer políticas no nos queda otra opción que guiarnos por un enfoque preponderantemente nomotético, creo yo. Pero la aproximación a la realidad será, como bien señalas, solamente aproximada (valga la redundancia), en el mejor de los casos.
No sé, Jinete, si para Harris eran equivalentes los conceptos Emic/Etic e Ideográfico/Nomotético. Yo he preferido considerar los primeros como más antropológicos (para la disciplina antropológica y sus estudios de campo) y los últimos más generales, aplicables a un espectro más amplio de cuestiones humanas. De hecho yo he redefinido en cierto sentido los conceptos de Harris de manera sui generis, adaptándolos a las ideas que quería transmitir, en lugar de haber creado conceptos nuevos con nombres nuevos. Quizá la cosa está cogida con alfileres, pero no veo otra forma de explorar nuevos terrenos en el mundo de las ideas. Al principio se tantea, se especula y finalmente se asientan las bases de una concepción, se definen los términos y las relaciones con claridad. Comprendo que muchas de las cosas que escribo tienen un carácter marcadamente especulativo, y que probablemente algunas sean peregrinas. Ese es el precio que pago por sondear, mi capital/riesgo.
Veo lo idiográfico como un modo de percibir y valorar las realidades que incide en los aspectos subjetivos y personales más que en los objetivos e impersonales. El derecho anglosajón puede ser más idiográfico que nomotético, no lo sé. Pero si ya las personas somos una mezcla de ópticas nomotéticas e idiográficas para qué hablar de las instituciones y las sociedades. Como tú mismo admites el resultado neto en la sociedad anglosajona es más bien nomotético.
Abrazos y Felicidades para BATIOLA y JINETE.
Esto es lo que yo llamo un pensamiento razonado. A lo mejor el Jinete pálido tiene razón en eso de que está cogido con hilos. Yo dría, más bien, que es un buen comienzo.
Salu2
Felicidades Batiola, también para el Jinete. Esta época, nueve meses después de navidades/nochevieja es prolífica, jeje.
Buena observación, jinete, la del derecho anglosajón. Mis conocimientos de tal sistema legal provienen, naturalmente, del visionado de películas americanas y nada más, pero en éstas, en efecto, llama la atención la importancia de la figura de la jurisprudencia, esto es, qué decidió algún juez antes en un asunto similar. Quizá ocurra eso porque tienen menos leyes.
Germánico, lo de emic/etic era solo una observación por si te interesaba, no son equivalentes a ideo/nomo. Oye, y lo de los alfileres no te lo tomes a mal, sabes que te admiro desde tus tiempos "clásicos", y además lo más probable es que yo no haya entendido muy bien tu post, mi dura cabezota está demasiado saturada de asuntos políticos.
Muchas gracias, ijon. Saludos a todos.
Gracias Coronel Kurtz,
El tuyo es también un buen comienzo.
Jinete,
La observación era pertinente. No tomo a mal lo de los alfileres. Es cierto.
Muchas gracias, estaba volviendome loca intentando comprender a Kroeber a través de la lectura de Marvin Harris. La palabra nomotético no existe en nuestro "real diccionario", me ayudaste, sin duda, gracias de nuevo. Por cierto, estoy de acuerdo en que los dos enfoque son necesarios y no excluyentes.
Me alegro de que te haya sido de utilidad.
Un saludo.
me impresiona que alguien haya podido explicar de esa forma tales conceptos. personalmente te agradezco infinitamente que me hayas ayudado sin saberlo en un trabajo escolar...porque como ya lo han dicho anteriormente, estos dos conceptos no aparecen en ningún "diccionarito"
Mi definición es un tanto sui generis, pero a falta de otras más aproximadas puede valer....
Abril 29 de 2008, sigue sirviendo maravillosamente tu definición para trabajar cn estos dos conceptos, la DRAE sigue sin considerarlos. Gracias.
Como la cosa siga así va a terminar por oficializarse mi definición...jjejejejee
He podido comprobar que muchas visitas de este blog se hacen a este post.
haaiiii gracias chiko
eres geeeniiial!!!
me ayudaste a comprender
estos rollos k la vdd no les
entendia naadaa
y sabes que eres como k
famozo jaja porque el profesor
de mi escuela uso tu "ensayo"
para explicarnos y tenemos q poner
tus palabras en nuestro examen
tu crees!!!'''
bueno babaiii!!
Bueno junto con agradecer y felicitar... considero simpático que esxita aún poca referencia frente a los conceptos que plantea el señor Harris... referente a esto ahi q cuestionar si lo q se plantea... todo concepto que pretende ser un elemento para definir o explicitar la perspectiva con la que pretendemos acercarnos a la realidad... tan compleja realidad... posee el caracter de producto o productor de realidades? ... la diferencia entre nomotético e ideográfico pretende... si es q los concideramos dos extremos... definir dos metodologías... me explico... el marxismo por ejemplo... es producto de un determinado momento y contexto histórico... si es un producto... o relamente posee la intención de generar lineamientos y estructuras del pensamiento... producir una perspectiva... q en este caso se transforma en una ideología y metodologia particular... por lo demás lo nomotético e ideográfcio responden a diferentes escalas de aproximación a un fenómeno y si han de existir las dos... es en forma complementaria... no deberían ni son de tal o cual forma los fenómenos sociales... que insisto ...tan complejos son... y que por ende requieren de todas las perspectivas posiblemente abordables...
se me olvidaba... lo nomotético se utiliza principalmente para referir procesos... y por ende... claro esta para llegar a generalidades...lo ideografico por su parte se vale de lo particular para representar un hecho... y no por eso...como algunos asumen estamos ablando de algo verdadero... por mi parte prefiero las generalidades y dejo lo particular para el individuo y la concecuencia de sus actos...
Muchas gracias Germánico, indudablemente tu texto me permitió entender mejor las diferencias entre los dos conceptos. Así entiendo que aunque las dos posiciones son antagónicas muchas viven conviven al interior de nosotros, en un dualismo constante.
gde81
Le reitero que efectivamente en la busqueda web aun no existe una clara definicion de los conceptos ya mencionados, le agradezco porque me ayudo en mucho!
Hola,
aunque ya ha pasado mucho tiempo desde que publicaste el post, yo me lo he encontrado hoy buscando una definición de nomotético -pues justo estoy empezando a leer el libro de Harris que comentas- y me ha venido estupendamente tu explicación del concepto. Aunque sea un poco sui generis como te han comentado algunos, y en cierto sentido lo es, no deja de ser una buena aportación que aclara el significado de esta idea. Gracias.
muy buenos todos los comentarios pero ser{ia mejor si anexaras los datos bibliogr{aficos de la fuente a la que se refieren...
Un comentario genial, una manera facil de enterder la diferencia entre los conceptos. Realmente en la actualidad no hay información en la red y estos comentarios se agradecen de corazon!!
Gracias, infminitas gracias. Por poner al alcance de todos el conocimiento,y por hacerlo sin esperar nada a cambio.
Fdo. Estudiante de Psicología algo harta de que los profesores recomienden sus propios libros.
Muy valioso tu análisis. Me gustó mucho tu estilo de escritura: clara y concisa sin perder elegancia. Gracias por compartir, me vino bárbaro.
Enorabuena.
Muchísimas gracias por esta explicación. Estoy estudiando las ciencias nomotéticas e ideográficas en pedagogía, concretamente en bases de la investigación en educación, y de verdad, te agradezco de corazn ésta explicación, pues me ha ayudado muchísimo dado que no había manera de comprenderla con la explicación del libro.
Muchas gracias de antemano.
Un saludo desde Alicante
Enorabuena.
Muchísimas gracias por esta explicación. Estoy estudiando las ciencias nomotéticas e ideográficas en pedagogía, concretamente en bases de la investigación en educación, y de verdad, te agradezco de corazn ésta explicación, pues me ha ayudado muchísimo dado que no había manera de comprenderla con la explicación del libro.
Muchas gracias de antemano.
Un saludo desde Alicante
Muchas gracias por tu información aclaraste muchas dudas al respecto.
saludos desde México
atte: janl
GRACIAS...ME HAS AYUDADO MUCHO
Gracias... me aclaraste varias dudas que tenia con respecto a estos dos conceptos.
En síntesis, lo ideográfico particulariza y lo nomotético generaliza.
Gisela
Gracias. Estoy estudiando al politólogo Sartori y tu comentario me ha venido de perlas! Tu aportación es genial!
Gracias!
Estoy estudiando Psicologia de las diferencias individuales y no entendia este concepto.
Muy buena reflexión, gracias
muy útil, geacias
Maldita sea, todo para acabar con un viejo dilema entre particularistas y generalistas aplicado a la arqueología de naufragio! ¬¬' maldita fatalidad! gracias por la clara explicación del nomoideo jeje
Gracias, muy buena para aclararme, estaba super liada.
Saludos.Ciao.
Muchas gracias, que interesante y aclaratoria explicacion.Soy estudiante de Pedagogia y en Educacion Comparada se tratan estos terminos, la verdad es que me ha servido de mucho encontrar este Blog pues ya entiendo mejor los terminos. Muchas gracias y enhorabuena.
Muchas gracias, por la explicación, me ayudaste mucho.
Saludos desde Colombia!!
Muy útil, es lo mejor que encontré, gracias.
Bien. fue interesante e iluminador para mí. Gracias
Excelente explicación... mil gracias me has ayudado montones.. y tienes razón en la web no se encuentra nada acerca de la distinción entre ambos conceptos.
Gracias por tu contribución
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