lunes, diciembre 24, 2007

viernes, diciembre 14, 2007

Energía Solar III ¿Y cuánto cuesta?

Andaba uno dándole vueltas infructuosamente a como explicar de forma sencilla y sin sacarse (aparentemente) de la manga demasiados datos con el fin de responder a la pregunta que titula el post cuando de repente vi la luz: Mejor que hablar de costes, hablemos de precios.

En efecto, buena gana de liarse con costes de inversión, gastos de explotación TIRs, VANs, Paybacks y zarandajas, cuando tenemos la respuesta en el BOE.

Veamos una vez más el ya famoso RD 661 que regula las tarifas a las que se compra la energía a los productores de renovables. En la página 17 tenemos que la tarifa para pequeñas fotovoltaicas (grupo b.1.1) es de 44,0381 c€/kWh. ¿Eso es mucho o es poco? Si buscáis vuestro recibo doméstico y veis que ese kWh os lo están cobrando en torno a 9 c€/kWh, no hace falta ser Einstein para deducir que algo falla. ¿Quien le paga la diferencia al productor de energía solar? Acertaron, el estafado contribuyente.

¿Y cual es el precio de verdad de la electricidad en el mercado? Aclaremos que el RD 661 arriba citado regula y tarifica la producción en régimen especial (cogeneración y renovables). Para el grueso de la producción (carbón, hidráulica, nuclear, ciclos combinados, fuel) el régimen ordinario de producción eléctrica establece un mercado (manipulable y manipulado, eso sí, debido al oligopolio generador, pero mercado). Las ofertas y demandas se casan a diario entre productores y distribuidores arrojando un precio de mercado.

Lo podemos encontrar por aquí, pero si no queréis buscar (es una página muy poco amigable), os diré que el precio medio del mes pasado (noviembre) fue de 4,7 c€/kWh, si bien aclaremos que se trató de un precio anormalmente alto. El resto del año ha estado por debajo de los 4 c€/kWh.

Seguro que el lector inteligente (los pepiños, ante tanto número, ya habrán abandonado) está con la mosca tras la oreja. ¿Serán así el resto de renovables? Pues no. Si volvemos al RD 661, veremos que, por ejemplo, la energía eólica (grupo b.2) tiene como tarifa 7,3228 c€/ kWh. Es decir, si tomamos como base la media de mercado de noviembre 4,7 c€/kWh, la eólica tiene una prima considerable, pero bastante razonable (del orden del 55%), y, desde luego, por debajo del precio de venta al consumidor doméstico, pero la prima para la solar, con esa misma base, sería ¡¡¡¡¡del 850%!!!!!!

Vamos, que no todas las renovables son iguales. La utilización de molinillos tienen ciertos problemas, aparte de los evidentes relativos a las pocas horas de funcionamiento equivalente al año, pues la saturación en una determinada zona obliga a sobredimensionar líneas, subestaciones, etc. y está subordinada a circunstancias impredecibles (cuando soplará el viento). Pero implantados con moderación, son una buena ayuda para reducir el consumo de energía fósil.

En cambio, a día de hoy, las subvenciones a la implantación masiva de placas fotovoltaicas, a lo que en realidad conduce es al enriquecimiento de unos cuantos (en la última lista de los más ricos de España ya se ha colado algún avispado fabricante), pues la escasez de silicio solar y de placas ha conducido a un mercado especulativo donde el precio no responde al coste, sino a la subvención que recibe de nuestros impuestos el productor.

En otro de los post de esta serie preguntaba el amigo Remache por otros tipos de renovables, prácticamente inexistentes, como serían el aprovechamiento de las olas o las mareas. Bien, éstas se encuadran en el grupo b.3 con una tarifa de 6,89 c€/kWh, por debajo de la eólica y a años luz de las placas solares. La pregunta es evidente: ¿Esto es así por amor al sol o por la tajada que están sacando unos cuantos?

El dinero público para apoyar tecnologías renovables que con un ligero empujón y el lógico abaratamiento de escala puedan llegar a competir en el corto y medio plazo, me parece estupendo y necesario. Las tomaduras de pelo para enriquecer a cuatro especuladores y algún político que pasa por allí, pues no.

Hace unos días, un conocido periodista arremetía injustamente contra las energías renovables, para defender la energía nuclear y hablaba de las subvenciones a la eólica. Con las cifras de arriba creo que queda bastante claro que la tomadura de pelo actual no está en los molinos. Nuclear sí, y renovables también. Pero sin mezclar churras y merinas.

martes, diciembre 11, 2007

Ausencia

Abandono los libros de neurociencia. Abandono los libros de microbiología, ecología, biología molecular, antropología, etología. Abandono la revista Investigación y Ciencia. Abandono la debida atención a mis obligaciones como padre y esposo. Abandono mis largos paseos por lugares de naturaleza abierta. Abandono el alcohol. Abandono la blogosfera. Abandono toda esperanza y me lanzo kamikaze a una oposición imposible, contrarreloj, sobre un tema que no me interesa especialmente y en el que no tengo gran conocimiento o pericia, como Don Quijote se lanzó a sus molinos, creyéndolos gigantes.

El año pasado, aproximadamente por estas fechas, tuve una depresión, o algo parecido. Este lo que tengo es un arrebato, una manía. Mi trastorno bipolar tiene periodicidad anual y se manifiesta en el cambio de año. Volveré en un par de meses, y quizás antes, brevemente, en alguna fecha señalada. Confío en que en mi ausencia Ijon Tichy les amenice el paso por este humilde lugar de Internet.

Un abrazo a tod@s, amig@s.

miércoles, diciembre 05, 2007

Triste, pero bello


Agridulce post del Coronel.


El movimiento del fuego es una danza de la materia que desaparece, transmutada en volátil plasma. Uno imagina que algún fuego alimentó ese hermoso cuerpo ahora tendido inerte, y que lo abandonó al morir, sin extinguirse. Pero la combustión requiere un combustible, y el alma requiere un cuerpo.¿No es inmensa y profundamente doloroso constatarlo cuando nuestro amor yace muerto?.